La Marina de Brasil (MB) incorporó el primer submarino de la clase riachuelo a su sector operativo el 1º de septiembre, a través de la muestra de armamento organizada en el astillero Itaguaí en Río de Janeiro. El evento contó con la presencia de importantes autoridades civiles y militares, como el comandante de la Marina de Brasil, Almirante Almir Garnier Santos y el Ministro de Defensa, Paulo Sérgio Nogueira de Oliveira.
El Riachuelo (S40) es el primero de la clase de cuatro submarinos convencionales con propulsión diésel-eléctrica que están renovando la Fuerza Submarina de la MB para continuar la protección y disuasión en la Amazonía azul de 5,7 millones de km², cuya riqueza de aguas, lecho y subsuelo marino son importantes para el desarrollo económico, impacto científico y ambiental. Es en esta área marítima donde los brasileños desarrollan actividades pesqueras, a través de las cuales viaja el 95% del comercio exterior brasileño y se explotan los recursos biológicos y minerales.
Llevadas a cabo a través del Programa de Desarrollo Submarino (PROSUB), las nuevas medidas impactarán tanto en el poder naval como en la promoción de la disuasión y la transformación de la tecnología brasileña y la industria de la construcción naval.
Según el ministro de Defensa, Paulo Sérgio Nogueira de Oliveira, "el Programa de Desarrollo Submarino es de importancia estratégica para el país. La construcción de estos nuevos submarinos bajo el PROSUB cumple dos grandes objetivos: la mejora de la capacidad operativa de nuestra Armada con el aumento considerable de su poder disuasorio y la ampliación de la protección de sus aguas jurisdiccionales alcanzando una presencia más efectiva en el Atlántico Sur y también el aumento de nuestra industria naval y el desarrollo de nuevas tecnologías, contribuyendo a la promoción de la economía nacional con la creación de miles de empleos directos e indirectos".
El Comandante de la Armada, Almirante Almir Garnier Santos, destacó que "el Riachuelo representa una inversión para la sociedad brasileña, en soberanía, en la riqueza del pueblo brasileño. Ya se han generado más de 20.000 empleos directos y unos 40.000 indirectos. Además, las riquezas de nuestra Amazonía Azul siguen siendo incalculables. Estamos hablando de algo grande y extremadamente importante para el futuro de nuestro país".
Como variante de los submarinos de fabricación francesa de la clase Scorpène, el Riachuelo incorpora nuevas tecnologías para la MB y es más moderno y capaz en comparación con los antiguos submarinos de la clase Tupi. Son más silenciosos y detectan más información a distancias aún mayores y con mayor precisión debido a los sensores asociados.
Para el comandante del submarino Riachuelo, Capitán de Fragata Edson del Valle de Freitas, "las capacidades operativas del S40 lo acreditan a la reducción del control ejercido por el oponente, facilitando el desempeño de las otras fuerzas. También permite realizar sembrado de minas, operaciones de inteligencia y rescate o infiltración de elementos de operaciones especiales en aguas enemigas".
Los submarinos Clase Riachuelo tienen 71 metros de eslora, 1.870 toneladas de desplazamiento, una tripulación de 35 marineros y la posibilidad de transportar 18 torpedos pesados F-21 del Grupo Naval y ocho misiles de lanzamiento vertical MBDA MM40 Exocet (o MANSUP).
El conjunto de sensores consiste en un sonar Thales TSM 2233 Eledone (DSUV-22), dos sonares pasivos de barrido lateral TSM 2253 integrados en el conjunto de sonares Thales S-Cube. El sistema de misión táctica es el Subtics, el Naval Group, el enlace de datos es el Thales DR 3000 y el periscopio es el Sagem Series 20 (APS) y la Serie 30 con visión nocturna integrada.
A través de un proceso de transferencia de tecnología, la construcción de los nuevos submarinos es llevada a cabo por mano de obra brasileña (ingenieros y técnicos) con la asistencia técnica de la empresa francesa Naval Group. El Programa de Nacionalización ya ha calificado a unas cuarenta empresas brasileñas para la fabricación de componentes submarinos en más de cien proyectos: la fabricación de válvulas de agua salada por Micromazza, la fabricación de baterías por NewPower y la fabricación de la Anchor Housing por Miba.
Para la construcción de submarinos brasileños convencionales y, en el futuro, del sistema de propulsión nuclear "Álvaro Alberto", se construyó en Itaguaí un complejo naval que cuenta con varias instalaciones, equipos y sistemas especializados.
"El Programa Nuclear de la Marina es la columna vertebral del Programa Nuclear Brasileño. Producimos pellets de uranio para que las Industrias Nucleares de Brasil puedan mantener Angra 1 y Angra 2 en funcionamiento, por ejemplo. El programa permite un doble uso de esta tecnología nuclear. Además de los militares, las áreas de drogas y alimentos también pueden utilizar esta tecnología, proporcionando un desarrollo tecnológico, científico y médico para Brasil", agregó el Comandante de la Armada, después de la ceremonia.