Colombia completó la modificación de dos de sus Boeing 737 con sistemas de guerra electrónica
- Florencia Lucero Heguy
- hace 14 horas
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La Fuerza Aérea Colombiana (FAC) concluyó en Suiza la instalación de sistemas avanzados de guerra electrónica (EW) en su pareja de aviones Boeing 737-700 y 737-800, un paso clave en el fortalecimiento de sus capacidades de inteligencia, vigilancia y control del espectro electromagnético. La modernización estuvo a cargo de la empresa israelí Elbit Systems Ltd., una de las principales proveedoras mundiales en tecnologías de defensa electrónica.
Las aeronaves, identificadas como FAC 1219 y FAC 1220, fueron transformadas a partir de plataformas originalmente de uso civil y equipadas con un completo paquete tecnológico que incluye capacidades de inteligencia de señales (SIGINT), sistemas de intercepción y análisis de comunicaciones, sensores electro-ópticos, contramedidas electrónicas y equipos para la detección, identificación y eventual perturbación de radares y emisiones adversarias.
El programa forma parte de un contrato firmado en 2022, con una inversión estimada en torno a los 90 millones de dólares, bajo un esquema de cooperación entre gobiernos. La integración de los sistemas se realizó en instalaciones especializadas en Suiza, donde se llevaron a cabo tanto los trabajos de modificación estructural como las pruebas de los equipos electrónicos antes de su certificación final.
Con esta incorporación, la FAC pasa a disponer de plataformas dedicadas a misiones de guerra electrónica, inteligencia, vigilancia y reconocimiento (EW/ISR), consideradas estratégicas para el control del espacio aéreo, la protección de infraestructuras críticas y el monitoreo de zonas sensibles, en particular áreas fronterizas y regiones de interés operativo.
Desde el ámbito militar colombiano destacan que la conversión de los Boeing 737 ofrece una combinación de autonomía, alcance y capacidad de carga que resulta especialmente adecuada para misiones prolongadas, permitiendo operar a gran distancia y durante extensos períodos, algo difícil de lograr con aeronaves más pequeñas.
Se espera que, tras su regreso a Colombia, los aviones entren en fase de integración operativa y entrenamiento de tripulaciones, con vistas a su plena incorporación al servicio.
