Colombia creará un batallón especializado en drones para enfrentar amenazas asimétricas
- Florencia Lucero Heguy
- 10 jul
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El Ejército Nacional de Colombia avanza en la conformación de una nueva unidad táctica destinada a operar, mantener y neutralizar vehículos aéreos no tripulados (VANT). Se trata del Batallón de Aeronaves No Tripuladas (BANOT), actualmente en fase de diseño y establecimiento doctrinal, cuya activación está prevista para finales de 2025 o durante el primer semestre de 2026.
Esta unidad surge como respuesta directa al creciente uso de drones por parte de grupos armados ilegales, quienes desde 2023 comenzaron a emplear dispositivos comerciales adaptados para lanzar explosivos sobre puestos policiales, bases militares y patrullas. El fenómeno, que se intensificó durante 2024, generó graves afectaciones a las fuerzas militares, en especial en zonas como el Cauca y Norte de Santander, donde la presencia de disidencias de las FARC, el ELN y bandas del narcotráfico es más fuerte.
Frente a este escenario, el Comando General de las Fuerzas Militares inició la adquisición acelerada de sistemas antidrones y dispositivos inhibidores. Al mismo tiempo, comenzó un proceso de modernización doctrinal que incluye la capacitación de personal, adquisición de nuevos sistemas y el desarrollo de una doctrina de empleo adaptada a las exigencias de la guerra moderna. El BANOT será una unidad de despliegue nacional, con capacidades operativas similares a las de los Batallones de Fuerzas Especiales o el Batallón de Operaciones Especiales de Aviación, pero enfocada exclusivamente en el uso táctico de drones.
El nuevo batallón se beneficiará de la experiencia obtenida a través de la cooperación militar con países aliados y organismos internacionales como la OTAN. Colombia, como único socio global de la OTAN en América Latina desde 2017, ha intensificado su participación en entrenamientos conjuntos, evaluaciones de interoperabilidad y programas de modernización. A principios de 2025, el Ejército inició una hoja de ruta con la Alianza para aplicar estándares operacionales a unidades clave, una política que ahora se extiende al campo de los VANT.
Actualmente, el Ejército Colombiano ya utiliza drones del fabricante DJI para misiones de inteligencia, vigilancia y reconocimiento, incluidos modelos equipados con visión nocturna y cámaras térmicas. Estos dispositivos han resultado fundamentales en operaciones como la “Operación Perseo”, desarrollada en el Cauca para recuperar zonas bajo control insurgente. Además, se incorporaron drones tácticos donados por Estados Unidos y sistemas VTOL adquiridos en España, lo que refleja una creciente inversión en capacidades no tripuladas.
Con la creación del BANOT, el Ejército Nacional de Colombia busca consolidar una doctrina específica para el uso de drones tanto ofensivos como defensivos. El objetivo es contar con una unidad especializada y autónoma que no solo opere sus propios VANT, sino que también esté preparada para neutralizar amenazas aéreas en escenarios de conflicto irregular. Esta iniciativa, además de modernizar la estructura militar, posicionará a Colombia como referente regional en materia de defensa contra tecnologías emergentes en el campo de batalla.
El despliegue del BANOT marcará un antes y un después en la estrategia de seguridad del país. Permitirá enfrentar con mayor eficacia a los actores armados que, aprovechando la accesibilidad de los drones comerciales, han logrado ampliar su capacidad de daño. En un contexto donde la guerra evoluciona hacia un escenario multidimensional y tecnológico, el Ejército colombiano busca no quedarse atrás. Con este paso, se encamina hacia un modelo más moderno, interoperable y preparado para los desafíos del siglo XXI.
