Por José Javier Díaz*
El pasado viernes 24 del corriente mes tuvo lugar en la Escuela de Aviación Militar (EAM) con sede en la Ciudad de Córdoba, la ceremonia del Primer Vuelo del Curso de Instrucción Aérea (CIA), hito que representa la recuperación -tras 35 años de no llevarse a cabo- de la actividad aérea para los Cadetes de IV Año de la EAM.
La ceremonia fue presidida por el Jefe del Estado Mayor General de la Fuerza Aérea Argentina (JEMGFAA), Brigadier General Xavier Julián Isaac, el Subjefe del Estado Mayor Conjunto (EMCO) de las Fuerzas Armadas, Brigadier Mayor Pedro Esteban Girardi, el Director de la Escuela de Aviación Militar, Brigadier Marcelo José Monetto y otras altas autoridades de la FAA, del Ejército Argentino, de la Armada de la República Argentina y de otras instituciones.
La ceremonia de Vuelo Solo del Curso de Instrucción Aérea (CIA) con el Vuelo Solo de los Cadetes de IV Año de la Promoción 89 de la EAM comenzó a las 11hs, con el aterrizaje de dos pilotos -un hombre y una mujer- a bordo de sendas aeronaves Tecnam P2002JF Sierra, quienes fueron recibidos en la plataforma por su Instructor de Vuelo, en este caso la Primer Teniente Sofía Vier, por sus camaradas de promoción que realizaron la tradicional manteada y las máximas autoridades presentes.
Posteriormente se realizó una formación frente al Edificio del Grupo Aéreo Escuela (GAE) y se leyó el listado de los 27 Cadetes que egresaron del CIA, quienes firmaron el Libro de Oro del GAE y recibieron sus parches, pañuelo y medalla tras ser “bautizados” con la tradicional brocha empapada en champagne.
Cabe destacar la emoción, alegría, orgullo y camaradería de los alumnos e instructores que participaron de la ceremonia, ellos son el futuro de la Fuerza Aérea Argentina y que se haya logrado concretar la exitosa implementación del Curso de Instrucción Aérea (CIA) tras 35 años de no ejecutarse por falta de material aéreo es una señal clara de que la conducción superior de la FAA tiene claro que su razón de ser es el vuelo, para lo cual deben contar con más pilotos y aeronaves en aptitud de vigilar y controlar el aeroespacio de jurisdicción argentina.
Novedades en la FAA
Durante la ceremonia Pucará Defensa tuvo oportunidad de entrevistar al Brigadier Isaac, con quien conversamos sobre diversos proyectos de gran relevancia para la Institución.
En ese sentido, Isaac afirmó que se ha avanzado en el proceso de artillado de los aviones de entrenamiento Beechcraft T-6C Texan II en dotación de la EAM, estando a la espera de recibir a la brevedad los manuales de operación para realizar tiro aire-aire y aire-tierra. Cabe recordar que ya se han incorporado varios pods de ametralladoras calibre 12,7mm de la firma belga FN Herstal y que la FAA tiene previsto incorporar munición convencional y guiada en los próximos años a través del Plan Plurianual de Adquisición de Munición. Por otro lado, recientemente la FAA concretó la compra de espoletas y está trabajando en el desarrollo y fabricación de pods de ametralladoras calibre 7,62 y 12,7mm de desarrollo propio en el Área de Material Río Cuarto a través de los especialistas de la Dirección General de Investigación y Desarrollo (DGID) y de la Dirección General de Material de la FAA.
Se trata de un hito muy importante para la FAA porque permitirá incorporar una mayor capacidad operacional a los doce Texan y con ello concretar el previsto intercambio de estas aeronaves a la III Brigada Aérea de Reconquista, Provincia de Santa Fe, en cuanto se disponga de al menos ocho EMB-312 Tucano modernizados con el kit de aviónica que provee la empresa privada argentina Redimec.
Respecto a los Tucano, Isaac confirmó que -hasta el momento- se han adquirido ocho kits de modernización y se espera tener operativas estas aeronaves durante el 2024, cuando serían replegadas a la EAM para formar parte orgánica del Grupo Aéreo Escuela, en tanto que los Texan harían lo propio con su despliegue permanente a la III Brigada Aérea.
Si bien el modernísimo sistema de entrenamiento terrestre de los Texan fue instalado en la EAM y no sería trasladado a la III Brigada Aérea, el intercambio de las aeronaves sería lógico dadas las mayores prestaciones de los T-6C por sobre los EMB-312, al menos hasta que la Fuerza Aérea Argentina pueda disponer de un nuevo Sistema de Armas (SdA) o cuente con los doce IA-58 Pucará remotorizados y modernizados.
Asimismo, en materia de alas rotativas comentó que se está avanzando en la modernización y artillado de los Hughes H-500, tareas que están a cargo del Área de Material Quilmes (AMQ), habiéndose concretado ya los primeros vuelos de ensayos para comprobar el correcto funcionamiento de la nueva aviónica y su aptitud para vuelo en condiciones nocturnas.
El JEMGFAA comentó que siguen adelante con la recuperación del sexto ejemplar de SA-315B Lama y que EE.UU. no dispone -por ahora- de helicópteros pesados (CH-47 idealmente o CH-46) almacenados en condiciones de ser puestos en servicio para recuperar y ampliar la capacidad de helitransporte pesado para la FAA y el Ejército Argentino.
En cuanto a las aeronaves de transporte y enlace, el Brigadier Isaac afirmó que están a la espera de recibir durante el año próximo los siete ejemplares de Beechcraft Hurón para la FAA y el que resta para la Aviación Naval, de manera de completar las 12 aeronaves previstas para la Fuerza Aérea y las 2 para la Armada Argentina.
Se está avanzando en la incorporación de dos Embraer 140 y un Boeing B-737-700; se espera que el F-27 pueda volver a volar en diciembre del año en curso y se ha solicitado formalmente la provisión de equipamiento de autoprotección (sistemas de alerta automática radar-láser-IR y de chaff/flare) el cual sería instalado en primer lugar en el C-130H Hércules matrícula TC-60 recientemente incorporado.
Finalmente, con respecto a la incorporación de cazas supersónicos, el Brigadier General Isaac indicó que está toda la documentación, que se ha completado la evaluación técnica, económica-financiera y solo resta la decisión política para definir cuál será el próximo sistema de armas de superioridad aérea que tendrá la Fuerza Aérea Argentina, el cual debe contemplar no solo los aviones sino también la capacidad de reabastecimiento en vuelo, su logística; armamento aire-aire y aire-superficie de corto, medio y largo alcance; capacitación para los pilotos y personal técnico; etc.
*El autor es Master en Dirección Estratégica y Tecnológica. Se desempeña como Consultor de Empresas y Gobiernos en temas de Defensa, Seguridad y Aeroespacio.
