La penetración de Rusia en las defensas orientales de Ucrania: no es un gran avance (todavía)
- Mick Ryan
- 13 ago
- 10 Min. de lectura
Si Rusia puede explotar su posición en el nuevo saliente del este de Ucrania, ¿podría resultar en un golpe en el campo de batalla y diplomático de Putin contra Ucrania en los próximos días?
Por Mick Ryan
“La situación sigue siendo compleja y dinámica. El enemigo está tratando de avanzar en esta dirección a costa de pérdidas significativas de personal y equipo. Las unidades dentro del cuerpo han planeado y llevado a cabo acciones para bloquear a las fuerzas enemigas en el área”. Primer Cuerpo Azov de la Guardia Nacional de Ucrania, 12 de agosto de 2025.
El delgado saliente que las fuerzas rusas han creado en el régimen defensivo ucraniano en el este de Ucrania en los últimos días se erige como una daga dirigida al corazón de la línea de ciudades fortaleza de Ucrania. Pequeños grupos de tropas rusas aparentemente han penetrado en una sección de la línea defensiva ucraniana que estaba fortificada, pero esas fortificaciones no estaban con personal en ese momento, según algunos informes.
Los informes sobre la escasez de mano de obra en las fuerzas armadas de Ucrania no son una historia nueva. La capacidad de Rusia para movilizar un gran número de tropas, y la incapacidad de Ucrania para hacerlo, ha sido una característica central de la guerra en los últimos dos años. Esta asimetría en la movilización de personal es una fuente clave de la ventaja actual de Rusia en la guerra terrestre. La situación es tan mala que la escasez de infantería ucraniana está provocando que una serie de otros militares tengan que volver a jugar como infantería en partes de la línea del frente. Un informe reciente de RFE/RL describe cómo:
"Conductores, artilleros y cocineros" mantienen la línea, dice Bohdan Krotevich, un oficial que anteriormente trabajó en el cuartel general de la Brigada Azov. "Un máximo de 12 combatientes tienen secciones de 5 a 10 kilómetros de ancho.
Esto ha creado una desventaja para Ucrania en la correlación de fuerzas terrestres y ha permitido a los rusos seguir adaptando sus tácticas de unidades pequeñas. Los rusos ahora emplean lo que el comandante en jefe ucraniano ha descrito como tácticas de infiltración total. El componente central de estas tácticas es el empleo de un pequeño número de infantería para penetrar en partes indefensas o mal defendidas de la línea del frente de Ucrania, apoderarse de terreno, atrincherarse y llamar a los siguientes escalones para consolidar sus posesiones y luego repetir el mismo enfoque una y otra vez.
Cabe destacar que estos ataques no siempre tienen éxito, y en muchas ocasiones, el asalto inicial de los rusos se apaga con una combinación de drones ucranianos, minas, fuego indirecto y directo. Pero cuando funciona, y Rusia está constantemente buscando debilidades ucranianas a lo largo de la línea, puede ser efectivo.
Un último punto: las tácticas de infiltración no son nuevas. Ha sido una respuesta de muchas instituciones militares cuando la letalidad del campo de batalla aumenta significativamente (la Primera Guerra Mundial en el frente occidental es solo un ejemplo de esto) y siempre es una opción para las operaciones ofensivas. Los rusos parecen haber aprovechado la infiltración para explotar las actuales deficiencias ucranianas sobre el terreno, a pesar de la visibilidad y la capacidad de ataque que tiene Ucrania con sus unidades de drones altamente efectivas y el desarrollo de su muro de drones.
Mientras escribo esto, hay informes de que las fuerzas terrestres rusas han podido llevar a cabo estas tácticas de infiltración con fuerzas desmontadas (con cierto apoyo de vehículos ligeros) hasta 17 kilómetros de profundidad dentro de las defensas de primera línea de Ucrania. Como muestran los mapas a continuación, sigue habiendo un grado de incertidumbre sobre la profundidad real de la penetración y el tamaño de las fuerzas rusas que ahora se encuentran en el saliente.
Pero se ha creado un saliente ruso al que Ucrania no tiene más remedio que responder.
Durante los últimos tres años, y especialmente a raíz de la exitosa ofensiva de Járkov de 2022 llevada a cabo por los ucranianos, muchos han esperado el próximo gran avance en el campo de batalla. Se suponía que la contraofensiva ucraniana de 2023 penetraría las defensas del sur de Rusia, liberaría grandes franjas del sur de Ucrania y llevaría a Rusia a la mesa de negociaciones. Sin embargo, la falta de sorpresas, el empleo de tropas inexpertas y la falta de facilitadores suficientes aseguraron que no hubiera avances por parte de los ucranianos.
La operación ucraniana de Kursk en 2024 aprendió de las lecciones de 2023. Logró un gran avance, pero la explotación se vio limitada por el tamaño de la fuerza ucraniana involucrada, la cobertura de fuegos, vehículos aéreos no tripulados, EW y logística, así como una respuesta defensiva rusa cada vez más fuerte. Con el tiempo, y con una importante inyección de tropas rusas y norcoreanas, Rusia ha recuperado la mayor parte de su territorio de Kursk.
Los acontecimientos de las últimas 72 horas han demostrado, una vez más, que la sorpresa es posible en el campo de batalla moderno. En las condiciones adecuadas, sigue siendo posible penetrar profundamente en el territorio controlado por el enemigo y lograr un efecto de choque que puede explotarse aún más.
Hay tres preguntas clave sobre esta operación rusa en curso, que busco abordar en este artículo:
¿Puede Rusia convertir esta penetración táctica en un avance operativo?
¿Aprovechará Putin esta penetración para influir en la toma de decisiones de Estados Unidos en Alaska y después?
¿Qué decisiones difíciles podría tener que tomar Ucrania para contener esta penetración?
¿Puede Rusia convertir la penetración táctica en un avance operativo?
La penetración se define en los manuales de tácticas como "una forma de maniobra en la que una fuerza ataca en un frente estrecho".
Generalmente, las fuerzas militares que realizan operaciones defensivas mantienen reservas para emprender operaciones de contraataque y contrapenetración. Esto permite dar forma, fijar y, con suerte, destruir las fuerzas penetrantes. Pero cuando un enemigo logra penetrar, el comandante de las operaciones defensivas, suponiendo que todavía haya un comando y control coherentes, puede contraatacar, emprender operaciones de demora o realizar una retirada.
La ubicación de la actual penetración rusa es potencialmente muy peligrosa para la estrategia defensiva oriental de Ucrania. Parece haberse centrado en meterse detrás de las ciudades del cinturón fortificado del este de Ucrania de Slovyansk, Kramatorsk y Kostyantynivka. En un informe reciente del Institute for the Study of War, se exploró en detalle la importancia de este cinturón de ciudades fortaleza (que se muestra en la imagen a continuación). Es una lectura muy recomendable, y se puede acceder a ella en este enlace.
Una parte importante del plan operativo ruso en el último año ha sido ejecutar un doble envolvimiento de esta región. El éxito de esta campaña se ha visto frenado por varios factores, entre los que destaca la campaña de un año para apoderarse de Pokrovsk.
Como todas las operaciones de este tipo, el tiempo es absolutamente crítico. Quien pueda utilizar el tiempo de manera más sabia en los próximos días ganará esta batalla crucial. Si Ucrania puede desplegar sus reservas para cortar el saliente más rápidamente de lo que Rusia puede aumentar los refuerzos en el saliente, se podría evitar el peligro.
Pero si Rusia puede enviar tropas más móviles, apoyadas por artillería, drones y bombas planeadoras de lanzamiento desde aviones, esta penetración podría convertirse en un gran avance. Esto podría suponer un cambio significativo en la situación en el frente oriental y comprometer potencialmente la capacidad de Ucrania para defender el territorio restante que posee en el Donbás. De hecho, esto podría cambiar toda la dinámica en el frente oriental y proporcionar a Rusia la plataforma de lanzamiento para futuras operaciones ofensivas en el este de Ucrania.
Pero, como aclaro a continuación, este saliente ruso en la actualidad sigue siendo solo una penetración táctica. No es un gran avance, todavía.
Todavía no es un gran avance. En el contexto militar, un avance describe la ruptura de las defensas avanzadas de un enemigo debido a un ataque. Esto podría ser un avance táctico en el que las fuerzas terrestres irrumpen y luego penetran en posiciones defensivas (preparadas o apresuradas) explotando a partir de entonces hasta un límite designado de explotación. Un avance también podría ser de naturaleza operativa. Aquí es donde múltiples acciones tácticas, en los ámbitos físico, cibernético y de la información, se unen no solo para perforar un régimen defensivo enemigo, sino también para romper la cohesión de los planes conjuntos e interinstitucionales para lograr el resultado estratégico deseado.
En ambos casos, los comandantes que buscan lograr un avance también deben tener múltiples planes de seguimiento para que puedan aprovechar al máximo el impacto generado por el avance y lograr los objetivos deseados de nivel superior.
No está claro en este momento si los rusos en esta parte de Ucrania tienen las reservas tácticas u operativas que pueden convertir esta penetración en algo parecido a un gran avance en el Donbás. Seguro que tienen algunas reservas, pero su ubicación y composición serán críticas.
El tipo de reservas que podrían convertir el saliente en un avance tendría que ser muy móvil (montadas en vehículos con ruedas u orugas), estar cerca de la penetración y ser capaces de entrar en la penetración con la mayor parte de su poder de combate intacto. Además, estas reservas tendrían que estar bien dirigidas y poseer objetivos claros. Finalmente, también tendrían que ser apoyados por artillería, drones y fuego aire-tierra (muy probablemente bombas de planeo de largo alcance). Si los rusos tienen todo esto alineado para explotar su nuevo saliente sigue siendo una pregunta abierta.
¿Putin aprovechará esta penetración para influir en la toma de decisiones de Estados Unidos en Alaska y después?
El momento en que un enemigo penetra en las defensas de primera línea y amenaza con una ruptura más amplia de la defensa general nunca es bueno. Pero el momento de esta particular penetración rusa en las defensas del este de Ucrania, deliberada u oportunista, podría ser devastador para Ucrania.
Con la cumbre Trump-Putin que se llevará a cabo en Alaska a fines de esta semana (sin representante ucraniano y ahora con expectativas más bajas), Putin ha fabricado un nuevo "éxito" en el campo de batalla para influir en los resultados políticos y estratégicos. Ha hecho esto antes.
Putin ha emprendido una costosa ofensiva en el este de Ucrania en los últimos 19 meses. Han aprendido y adaptado continuamente sus tácticas y han construido una asimetría significativa. Con esta asimetría de mano de obra (apoyada por fuegos terrestres y aéreos, así como por una fuerza de drones en mejora), las fuerzas rusas han podido ejecutar una campaña de destrucción lenta pero devastadora en todo el este de Ucrania. Ha resultado en más de medio millón de bajas rusas en el último año, lo que es un terrible retorno de la inversión en términos militares.
Pero en términos políticos y estratégicos, fue una excelente inversión que ha valido la pena para Putin. En los últimos seis meses de 2024, durante las etapas finales de la campaña presidencial de Estados Unidos, se llevó a cabo una campaña rusa feroz y reñida para acelerar las ganancias territoriales y proyectar una sensación de victoria rusa inevitable en la mente de los votantes y políticos estadounidenses que ya se inclinaban a no apoyar a Ucrania. Consiguió lo que quería con la administración entrante.
Putin está haciendo lo mismo ahora. Si bien es posible que nunca sepamos si esta penetración fue programada deliberadamente o es solo una coincidencia fabulosa (mi apuesta está en lo último), Putin ciertamente la aprovechará en los próximos días para crear un avance político con Trump.
Putin utilizará los nuevos acontecimientos en el campo de batalla del este de Ucrania para tratar de convencer a Trump de que ya no vale la pena apoyar a Ucrania y que su derrota es cuestión de tiempo. Esto, a su vez, está diseñada para que Trump coaccione a Ucrania para que llegue a un acuerdo de alto el fuego que no sea de interés para Ucrania a corto o largo plazo.
Pero también habrá impactos estratégicos en Ucrania. Además del obvio efecto psicológico que esto probablemente tendrá en civiles y soldados, volverá a plantear la cuestión sobre la eficacia de la estrategia del frente oriental de Ucrania y la calidad del mando y el liderazgo en algunas partes de la línea del frente.
¿Qué decisiones difíciles podría tener que tomar Ucrania para contener la penetración?
Finalmente, dadas las ventajas rusas exploradas anteriormente, y las deficiencias de mano de obra existentes en Ucrania a lo largo de la línea del frente, ¿podría Ucrania verse obligada a tomar algunas decisiones tácticas difíciles que tendrán impactos operativos y estratégicos?
Dada la escasez de mano de obra que Ucrania ha experimentado en los últimos dos años, la cuestión obvia es si Ucrania tiene fuerzas suficientes para cubrir sus dos grandes desafíos en el este en la actualidad: defender Pokrovsk (el principal esfuerzo de Rusia sobre el terreno) y sellar el nuevo saliente ruso (¿potencialmente el nuevo esfuerzo principal de Rusia?).
Ucrania puede tener que tomar la terrible decisión de tener que renunciar a Pokrovsk o sellar la penetración.
Sigue habiendo mucha incertidumbre sobre la situación sobre el terreno al norte de Pokrovsk en la actualidad. La situación aún no es una crisis, pero si los rusos son capaces de explotar su posición en el nuevo saliente, esto podría resultar en la combinación de un campo de batalla y un éxito diplomático de Putin contra Ucrania en los próximos días.
La buena situación estratégica de Rusia
La penetración rusa en las defensas orientales de Ucrania, que aún puede convertirse en un gran avance, también puede tener el efecto de crear un avance político para Putin en los próximos días. Como escribí a principios de este año, a raíz de la reunión de febrero de Trump y Zelenskyy, y la Conferencia de Seguridad de Múnich, Putin ha sido experto en utilizar pequeñas ganancias en el campo de batalla y aprovecharlas en ganancias estratégicas:
Putin ha logrado un sorprendente avance político en las últimas semanas. No imagino que el frente de tormenta geopolítica que ha pasado sobre Europa fuera completamente su plan, pero ciertamente jugó un papel en que sucediera. Él y Rusia son los mayores beneficiarios. Nos recuerda que, a pesar de sus muchas debilidades, Rusia sigue siendo un adversario peligroso para Ucrania y para el resto de nosotros.
En las operaciones militares, un avance es inútil si no hay capacidad para explotarlo. En esencia, estás desperdiciando la vida de los soldados para crear un agujero que se puede sellar fácilmente si no tienes una fuerza significativa para fluir a través de él y aprovechar al máximo a un enemigo conmocionado y paralizado. Pero dada la ventaja de Rusia en mano de obra, artillería y municiones lanzadas desde el aire (bombas de planeo) en el este de Ucrania, existe la posibilidad de que puedan convertir la nueva penetración en un gran avance.
La situación sobre el terreno en el este de Ucrania sigue siendo incierta, y las actividades tácticas en torno al saliente ruso se producen en gran medida en una zona gris donde el control cambia constantemente. Puede ser un punto muy peligroso en esta guerra para Ucrania. Putin se encuentra en una situación en la que podría dar un doble golpe de avances que podrían forzar un acuerdo de alto el fuego desfavorable en Ucrania.
Rusia se encuentra en una de sus posiciones más ventajosas de la guerra desde febrero de 2022. Queda por ver si puede explotar esto en el campo de batalla y en la mesa de negociaciones. Pero si puede, eso sería desastroso para Ucrania, así como para la situación de seguridad más amplia en Europa.
