El 4 de septiembre, Paulo Alvarenga, CEO de ThyssenKrup Sudamérica, anunció el corte de las primeras chapas que integrarán las unidades de construcción del casco y la superestructura del primer buque de la serie de fragatas de la clase Tamandaré / F200.
El programa está siendo llevado a cabo por el Consórcio Águas Azuis formado por thyssenkrupp Marine Systems, Embraer Defense & Security y Atech y gestionado por la Empresa gestora de proyectos marinos (EMGEPRON).
En total, se construirán cuatro fragatas modernas en el astillero Oceana, ubicado en Itajaí (SC), para su operación por la Marina de Brasil. El país se beneficiará de la alta transferencia de tecnología en áreas consideradas críticas en la construcción y en el sector naval, con la generación de al menos 2.000 empleos directos para la construcción de fragatas y 6.000 indirectos.
El consorcio, anunciado ganador el 28 de marzo de 2019, utiliza como base los buques de la clase Meko A100 y contará con tripulación de 130 militares, tendrán 107,2m de eslora, manga de16m, calado de 5,2m, desplazamiento de 3.360 toneladas, autonomía de 9.260km, velocidad máxima de 25,5 nudos y cuatro motores MAN – 12V 28/33D STC.
El armamento serán los misiles MBDA Sea Ceptor y MANSUP; cañones Leonardo 76/62 MM SRGM, Sea Snake 30mm y Bofors 40 Mk4; sistemas de lanzamiento de torpedos SEA TLS-TT; y sistema de señuelos Terma C-Guard.
Los sensores incluyen el radar de búsqueda volumétrica Hensoldt TRS-4D ROT; Radar de dirección de tiro Thales STIR 1.2;Radares de navegación Raytheon (banda X); Radar de búsqueda de superficie Raytheon (banda S); sonar de casco Atlas Elektronik ASO 713; MAGE MB/Omnisys MK3 Defender; miras optrónicas SAFRAN PASEO XLR. También existe el sistema de gestión de combate Atlas-ANCS y el sistema de gerenciamiento de plataforma L3 MAPPS.
El primer buque tendrá un 30% de contenido local y se alcanzará hasta un 40% en el resto.
