El 26 de diciembre del 2023, comenzó a operar la aerolínea estatal Mexicana de Aviación con una flota de cinco aviones, dos de los cuales son Embraer 145 rentados a la aerolínea regional TAR y tres sonBoeing 737-800NG que pertenecen al Escuadrón Aéreo 502 de la Fuerza Aérea Mexicana (FAM).
Los Boeing 737-800 llegaron a la FAM nuevos de fabrica en el 2015, a través de un contrato de arrendamiento financiero con Banobras, para reforzar la capacidad de transporte del Escuadrón Aéreo 502 y reemplazar a los Boeing 727-200 que ya contaban con más de treinta años a cuestas y que, irónicamente, habían pertenecido a la anterior Mexicana de Aviación. Los Boeing 737-800 se convirtieron en protagonistas los últimos años al apoyar diversas misiones de apoyo en México y el Mundo, siendo las más recordadas las efectuadas para rescatar a mexicanos de Ucrania e Israel.
En ese sentido, el 26 de diciembre se preguntó al secretario de la Defensa nacional si estos aviones de la Fuerza Aérea van a ser reemplazados, a lo que el secretario respondió: “No, ya los aviones dejaron de pertenecer a la Fuerza Aérea Mexicana, ya son aviones de la línea aérea, pertenecen al Estado mexicano; siempre han pertenecido al Estado mexicano, nada más los teníamos dando servicio en la Fuerza Aérea Mexicana. Se pasan allá, ya no serán controlados por la Fuerza Aérea. Si hubiese necesidades, tenemos otros aviones, no con las mismas capacidades, pero tenemos aviones C-130 Hercules; tenemos aviones C295 también; son aproximadamente 40 a 50 personas que se pueden trasladar; tenemos aviones con menores capacidades, 18 a 20 personas, que no todos tienen la capacidad para poder, de la misma manera que lo hacíamos con los 738-800, ir como fuimos a Turquía, como fuimos a Europa, no va a ser tan sencillo, pero lo que es el continente americano lo podemos cubrir con los aviones que tiene la Fuerza Aérea Mexicana.”
Debemos recordar que las capacidades de transporte estratégico de las Fuerzas Armadas de un país se ven en estos momentos de emergencia y crisis humanitaria, en las que hay que evacuar ciudadanos nacionales, y que es una de las obligaciones que tiene todo Estado moderno, y a partir de diciembre de 2023 México ya no cuenta con ellas.
En días pasados, esta pérdida de aeronaves, combinada con varios aviones parados por mantenimiento en el Escuadrón Aéreo 302 que opera C-130 y C-27J, han hecho que la Secretaría de la Defensa Nacional tenga que recurrir a los viejos aviones Boeing 727 de la Guardia Nacional para realizar traslados de personal de Fuerzas Especiales a los Estados de Tamaulipas y Tabasco, lo que repercute en los costos, al ser aeronaves más antiguas, y aumenta los riesgos al personal que las utiliza, porque, sumado a las tareas propias de seguridad pública, ahora se suman más horas de vuelo para transportar personal del Ejército Mexicano.
La flota de la Guardia Nacional se compone de tres aviones Boeing 727-200, matriculadas GN-401 (XC-MPF), GN-402 (XC-NPF) y GN-403 (XC-OPF) transferidos de la FAM en el 2016, al darlos de baja, mismos que operan desde su base en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) y son los últimos Boeing 727 en servicio militar en Latinoamérica y están entre los últimos que vuelan en la región.
Es así como el continuar usando aviones que fueron dados de baja hace siete años solo implica un retroceso en las capacidades de transporte de la Fuerza Aérea Mexicana.
