China despliega nuevamente su flota alrededor de Taiwán
- Santiago Rivas

- hace 2 horas
- 3 Min. de lectura

Según informó Reuters el pasado 4 de diciembre, la Armada China está realizando un nuevo ejercicio a muy gran escala alrededor de Taiwán, con cerca de un centenar de buques tanto de su armada como de su guardacostas, además del despliegue de otros buques en lo que han informado que son visitas de buena voluntad, como el Task Group 989 que está de visita en Indonesia con el buque Changbai Shan.
“China se encuentra en medio de lo que tradicionalmente es una temporada ajetreada de ejercicios militares, aunque el Ejército Popular de Liberación no ha hecho ningún anuncio de maniobras a gran escala con nombre oficial” informó Reuters, que además destacó que esto está ocurriendo mientras China y Japón atraviesan una crisis diplomática después de que el primer ministro japonés, Sanae Takaichi, dijera el mes pasado que un hipotético ataque chino contra Taiwán, gobernado democráticamente, podría desencadenar una respuesta militar desde Tokio.
Pekín también se ha enfadado por el anuncio del mes pasado del presidente taiwanés Lai Ching-te de 40.000 millones de dólares adicionales en defensa para contrarrestar a China, que considera la isla como un territorio propio.

Como analizáramos recientemente , China había realizado en abril el ejercicio "Strait Thunder-2025", en el cual se simuló una operación contra Taiwán.
Los buques chinos se han concentrado en aguas que se extienden desde la parte sur del Mar Amarillo, pasando por el Mar de China Oriental y hasta el disputado Mar de China Meridional, así como hacia el Pacífico, según cuatro funcionarios de seguridad de la región, de acuerdo con Reuters, que agregó que sus relatos fueron corroborados por informes de inteligencia de un país de la región, que detallaban el despliegue. Para el día jueves, había más de 90 buques chinos en operaciones, habiendo pasado los cien a comienzos de la semana.
Tsai Ming-yen, directora general de la Oficina de Seguridad Nacional de Taiwán, dijo el miércoles que China se encuentra ahora en lo que suele ser la temporada más activa para sus ejercicios militares. A fecha de la mañana del miércoles, China tiene cuatro formaciones navales operando en el Pacífico occidental, y Taiwán las está vigilando, dijo Tsai, sin dar detalles.
"Por eso debemos anticiparnos al enemigo de la forma más amplia posible y seguir vigilando de cerca cualquier cambio en las actividades relacionadas", dijo cuando se le preguntó si China podía organizar nuevos ejercicios específicos de Taiwán antes de que termine el año.
Según informó Reuters, uno de los funcionarios consultados, que al igual que los demás habló bajo condición de anonimato dada la sensibilidad de la situación, dijo que Pekín había comenzado a enviar un número superior de buques a la región tras el 14 de noviembre, cuando convocó al embajador japonés para protestar por los comentarios de Takaichi sobre Taiwán.

"Esto va mucho más allá de las necesidades de defensa nacional de China y crea riesgos para todas las partes", dijo el funcionario informado sobre el asunto, añadiendo que Pekín estaba probando las respuestas en las capitales regionales con este despliegue "sin precedentes".
Las Fuerzas de Autodefensa de Japón declinaron hacer comentarios específicos sobre los movimientos militares chinos, pero afirmaron que no evaluaron que hubiera habido un aumento "brusco" en las actividades desde el 14 de noviembre.
"A pesar de ese punto, se cree que el ejército chino busca mejorar su capacidad para realizar operaciones en espacios marítimos y aéreos más lejanos mediante el fortalecimiento de su poder naval", afirmó en un comunicado.
Junto con aviones de combate, algunos de los buques chinos en la zona han llevado a cabo ataques simulados contra buques extranjeros, así como operaciones de denegación de acceso destinadas a impedir que fuerzas externas envíen refuerzos en caso de conflicto. Otras dos fuentes dijeron que los países de la región están siguiendo de cerca el desarrollo, pero añadieron que hasta ahora no creen que el despliegue conlleve riesgos significativos.



